Yo me empeño en decirle que no hace falta.
Que hay cosas que es mejor no escribirlas muchas veces
por si se gastan.
Pero exige su poema también en este libro
y a mí me da no sé qué hablar de las cosas que son sólo nuestras
y de nadie más.
Porqué sé que no hace falta
y mi poema va por dentro y a diario
no quiero contarle nunca a nadie
que con su amor llegó la vida al principio de todos los principios.
Nadie nunca sabrá
que desde aquel entonces en julio
las madrugadas invernales del lunes
me saben a sábado por la tarde y libre.
Lo juro.estibaliz san sebastián, de "Cordelia se borra del partido"